05 Jul LOS TIEMPOS EN LA EMPRESA FAMILIAR
Escribo estas líneas recién acabado un año más, y van veinte, el programa de gobierno de empresas familiares que dirijo en IE Business School y bajo el influjo de una intensa semana debatiendo con prominentes familias empresarias que nos acompañan cada curso.
Los propietarios de familias empresarias se muestran preocupados por el creciente protagonismo del populismo en los gobiernos de cada vez más países que impulsan políticas que, gran error, penalizan la creación de un ecosistema potente de empresas familiares. También es preocupante que la acción de muchos gobiernos pone solo el foco en el corto plazo, el que permite ganar elecciones, cuando muchas de las grandes transformaciones que demanda la agenda social son de amplio calado y largo horizonte.
En general, poco que objetar a estas reflexiones. Ahora bien, hay que ser consistentes con ese discurso y aplicárselo cada cual en su casa y en su negocio. A las familias empresarias hay que pedirles que tampoco piensen en la “next election” y sí piensen y actúen en términos de “next generation”.
Los cuatro grandes pilares sobre los que se sustenta una familia empresaria acaban siendo la familia, los negocios, el patrimonio y la reputación. El tratamiento de esas cuatro columnas sin duda demanda una estrategia, una planificación y una toma de decisiones que, sin descuidar el día a día, deben tener un enfoque de largo plazo. Precisamente, quienes sí actúan con ese horizonte se encuentran que ese compromiso acaba por ser una fuente de enormes ventajas competitivas, muy característica de los negocios familiares que consolidan su posición y se convierten en líderes de sus industrias.
Los cambios del entorno, las crisis cada día más numerosas, los conflictos geoestratégicos, la hiperinflación, los desafíos para hacer funcionar nuestra cadena de suministros, el auge de la inteligencia artificial o el metaverso son oportunidades excelentes de hacer más robustos nuestras empresas familiares si hay una acción de gobierno comprometida con las necesarias trasformaciones tan necesarias para la sostenibilidad de medio y largo plazo.
En esta concepción que propongo, con un ojo puesto en el día a día y otro en la siguiente generación, cada vez va a ser más necesario apostar por el multiliderazgo frente a modelos “rey sol” de hiperliderazgo. La sostenibilidad de una empresa familiar demanda hoy aglutinar todo el talento necesario, en la familia y fuera de la misma.
Me gustan mucho los mensajes publicitarios de la mítica marca de relojes Patek Philippe, por cierto, una extraordinario empresa familiar, que vienen a decir que nunca eres propietario de sus relojes sino que más bien los cuidas para entregarlos a la siguiente generación. Esa mirada hacia la “next generation” es el horizonte de tiempo que debe imperar en las familias con vocación de trascendencia. Animo pues a los lectores a trabajar con ese sentido del tiempo, tan propio de las familias empresarias de referencia. Del “next election” a la “next generation”.
Hasta pronto. Incluso en estas circunstancias excepcionales, recuerda esto. No dejes de esforzarte por ser muy feliz que, al final del día, es lo más importante para ti y los que te rodean.
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