20 Jul REFLEXIONES SOBRE EL CONCEPTO DE FAMILY OFFICE
Queridos emprendedores y familias empresarias:
Cada vez son más las familias que se interesan por el concepto del Family Office u Oficina Familiar.
Lo cierto es que se trata de un concepto que no responde a una realidad homogénea en todos los casos por lo que merece la pena aclarar algunas cuestiones al respecto.
En su acepción más básica, la Oficina Familiar surge cuando las familias empresarias acumulan un patrimonio económico que se ha ido gestando, bien por la entrega de dividendos derivados de sus negocios o bien por la liquidez que surge cuando se vende la empresa familiar o alguna de sus filiales. La misión del Family Office es precisamente preservar el patrimonio a través de una gestión eficiente que permita que llegue a las siguientes generaciones.
A partir de este modelo general podemos identificar, con fines pedagógicos, tres modelos de Family Office:
- Modelo 1: si la familia empresaria cuenta con un patrimonio limitado que no permite generar su propia rentabilidad, no se justifica crear una unidad con recursos propios para gestionar dicho patrimonio familiar. En estos casos las familias encargan la gestión de su patrimonio a un “Multi-FamilyOffice” que son firmas de altísima especialización en la gestión del patrimonio de varias familias. Cada familia acaba por definir su estrategia inversora que es ejecutada por los ejecutivos del Multi-FamilyOffice. La oferta de “Multi-Family Office” cada vez es mayor y se suelen especializar por el ticket mínimo que definen para poder contratar sus servicios.
- Modelo 2: cuando la familia empresaria dispone de un patrimonio importante que genera una elevada rentabilidad, muchas familias optan por crear su propio Family Office para gestionar su patrimonio. Esas estructuras están lideradas por profesionales, miembros de la familia o no, con experiencia en el ámbito financiero.
Este modelo permite la razonable separación entre la gestión del patrimonio y la gestión empresarial teniendo en cuenta que ambos ámbitos demandan diferentes capacidades, diferentes estrategias y diferentes personas por cuestiones de especialización y confidencialidad.
Actuando de manera responsable las familias suelen definir en su plan estratégico familiar cuestiones básicas que definen su modelo de Family Office como son las siguientes: los objetivos que persiguen de la gestión patrimonial tanto desde el punto de vista económico como socio-emocional, la estrategia definida para alcanzar dichos fines, las estructuras jurídicas más apropiadas para ejecutar las estrategias patrimoniales o la identificación del perfil y número de profesionales que conformarán la oficina familiar.
El hecho de contar con equipos propios no supone que desde el Family Office no se subcontraten los servicios con diferentes expertos en materias legal, fiscal, financiera, bancaria, etc para implementar las estrategias financieras definidas en el plan estratégico familiar.
En términos generales, aunque esto siempre está matizado por la estrategia que define cada familia, éstas suelen repartir su patrimonio entre opciones como son la inversión en activos financieros, la inversión inmobiliaria, la inversión en start ups, la inversión industrial y los recursos dedicados a la acción filantrópica.
- Modelo 3: algunas familias empresarias sofistican los objetivos de su propia oficina familiar y, además, de la gestión financiera, se le encomiendan otros asuntos de la que podemos denominar como “dimensión familiar” como pueden ser los siguientes:
- Apoyo a la gestión de la Fundación Familiar u otras formulas de acción de impacto de la familia
- Servicios de apoyo a los miembros de la familia empresaria
- Definición y ejecución de planes de formación para la familia empresaria que en los casos más avanzados supone la creación de una “Escuela de Accionistas Responsables”
- Apoyo para la redacción y revisión de acuerdos de accionistas, protocolos o planes estratégicos familiares
- Coordinación de los órganos de gobierno familiar
- Organización de eventos y viajes de la familia
- Gestión de activos comunes de la familias (fincas, casas, barcos, aviones,..)
- Coordinación de despachos y profesionales que prestan servicios a la Oficina Familiar
A modo de resumen, es relevante enfatizar que las familias responsables deben crear un patrimonio no afecto a la actividad empresarial que permite sin duda diversificar riesgos, cuestión particularmente importante en tiempos tan turbulentos como los que nos toca vivir.
En nuestro particular enfoque son cuatro los grandes pilares que conforman el legado familiar: la familia, los negocios, la reputación y el patrimonio. Con esta perspectiva más holística se va a favorecer la transmisión de ese legado a través de las generaciones.
Hasta pronto. No dejes de esforzarte por ser muy feliz que, al final del día, es lo más importante para ti y los que te rodean.
Enrique Mendoza
Publicada a las 20:52h, 20 julioDe acuerdo Manuel, incluso yo he conformado un Comité de Family Office, como primer paso para constituir en el futuro en Family Office como personería juridica