Española, INTERNACIONAL, Internacionalización, LIDERAZGO, PERSONAS Y VALORESNo hay comentarios
La importancia de la empresa familiar es innegable, pues se ha convertido en la fórmula dominante en la economía mundial.
Este modelo de negocio, que se caracteriza por ser un proyecto y unos valores compartidos que se suceden por generaciones, cuenta, precisamente por ello, con una singularidad que podemos caracterizar en su visión de largo plazo, el deseo de transcendencia intergeneracional.
Asimismo, la empresa familiar es un tipo de organización en la que convergen muchos intereses y se tratan de abordar diferentes retos.
Por todo esto, es necesario, la existencia de un gobierno corporativo que equilibre la gestión de los asuntos de negocio, generalmente marcados por parámetros financieros, con aquellos de familia donde predominan las cuestiones socioemocionales.
Este informe regional elaborado por el Director General de Executive Education y Profesor titular en el IE Business School, Manuel Bermejo, aboga por la necesidad de contar con un Consejo de Administración, así como un Consejo de Familia que coordinen la gestión y la planificación de la empresa para así cumplir, con éxito, los dos grandes deseos de su fundador: verla crecer, evolucionar y hacerse fuerte (crecimiento empresarial, expansión e internacionalización) y entregarla a sus descendientes para que perdure en el tiempo.