¿MONARQUIA ABSOLUTA O REPUBLICA FEDERAL?

¿MONARQUIA ABSOLUTA O REPUBLICA FEDERAL?

INGG039222225

Queridos emprendedores y familias empresarias,

Bajo este provocador título no pretendo entrar en la refriega política sino facilitar el debate sobre el futuro de la empresa familiar.

Existe una concepción clásica de la empresa familiar que la verdad siempre me ha recordado a las monarquías absolutas. Desde estos presupuestos, la empresa familiar era fundada por un líder hipercarismático de cualidades excepcionales que van desde la enorme inteligencia hasta un don innato para detectar oportunidades de negocio pasando por una capacidad de trabajo brutal y una habilidad comercial fuera de lo común. Si analizamos a fondo la cuestión, muchas de las empresas familiares, y muchas de las de especial éxito, han respondido a este modelo. Por tanto, desde el pragmatismo de la evidencia el formato es impecable.

Bajo la concepción clásica cabría esperar que el líder fuese sustituido por otro líder de la familia del que se esperaba fuese una especie de clon de su antecesor. Y de alguna manera también se pensaba que la perpetuación en la explotación de una actividad empresarial concreta era la que cohesionaba a la familia y daba sentido de legado.

Por último, en este tradicional enfoque, el control accionario de la familia diríamos que era total.

Insisto, la evidencia nos ofrece múltiples ejemplos sobe los beneficios del sistema clásico.

Ahora bien, no olvidemos que cuando se empezó a estudiar el fenómeno de la empresa familiar y a establecer los principios doctrinales sobre su buena gestión, el mundo era diferente. Por más que hablamos de apenas dos o tres décadas.

Nuestro mundo es aquel donde las compañías de mayor valor y más valoradas para trabajar son las ya clásicas de la economía digital y las tecnologías. Los Apple, Facebook, LinkedIn, Twitter, Google, Amazon, Yahoo….. Un mundo en el cual apenas un grupo de 50 tipos es capaz de armar un proyecto como WhatsApp cuyo valor real de venta asciende a 16 Billones de dólares y con casi 500 millones de clientes al mes. O un mundo en el cual recientemente hemos  visto como Alibaba protagonizaba un récord  Guiness, cual la mayor OPV de la historia.

¿Puede en esta sociedad del cambio garantizarse la continuidad de la empresa familiar a través de la explotación del mismo negocio que creó el fundador? ¿Se pierde el carácter de empresa familiar por desarrollar negocios con accionistas ajenos a la familia? ¿Se es menos empresa familiar por vender el negocio tradicional en un momento dado? ¿Es fácil que a un líder familiar de excepcional carácter emprendedor le suceda una hija o un  hijo con idénticas capacidades?

La respuesta a estos interrogantes seguramente nos incitan seguramente a pensar en una concepción nueva de la empresa familiar. Que, a mi juicio, y desde el más absoluto respeto a la fórmula tradicional, se va a adecuar mucho más a la nueva realidad.

De hecho ya estamos viendo situaciones, que incluso empiezan a ser consideradas como referentes, del tipo: nombrar CEOs no familiares y concentración de miembros de la familia en los órganos de gobierno, venta del negocio tradicional para empezar a desarrollar nuevas actividades, creación de conglomerados con incursión en nuevos negocios bajo el liderazgo de las nuevas generaciones, integración de empresas familiares en grupos más grandes para poder acometer mejor los retos de la globalización,… En fin, un sinfín de estrategias y decisiones que desde mi punto de vista no debieran servir para quitar a esos negocios su carácter de empresas familiares. Acciones que al final del día, y por seguir con el paralelismo con las formas de Gobierno de las naciones, nos orecen un aspecto más parecido a una república federal.

En el fondo del asunto late la idea de una evolución del modelo de las familias empresarias: de la perpetuación de una actividad concreta a la creación de valor, y compartido, a través de las generaciones.

Hasta pronto. Pese a todo, no dejes de esforzarte por ser muy feliz que, al final del día, es lo más importante para ti y los que te rodean

 

Sin comentarios

Publicar Comentaria

Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Al hacer clic en el botón Aceptar, aceptas el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Ver
Privacidad