24 Sep COHESION FAMILIAR: ¿QUE Y PARA QUE?
Queridos emprendedores,
Acabo de participar en un seminario en la Cámara de Comercio de Madrid organizado por la Fundación Numa en torno al sugerente asunto de la cohesión familiar.
Sin ningún género de duda un factor común en empresas familiares de éxito es un alto grado de cohesión pero el punto es cohesión, para qué?
Podemos establecer que la cohesión familiar facilita que las familias empresarias coincidan en una serie de objetivos básicos. Cada familia, y cada negocio, es un mundo pero, en general, mi experiencia es que esos objetivos suelen ser dos:
– Que la familia desarrolle unas relaciones armónicas en torno a un proyecto y unos valores compartidos
– Que el negocio crezca de manera sostenida y rentable
Si se me permite el símil náutico, se trata de que la familia tenga claro el rumbo, la velocidad de crucero, el tipo de barco, y elija el perfil del capitán y la tripulación más acordes a la travesía definida. Claro, que una vez en el barco surgirán tormentas, momentos de viento a favor, de viento en contra, mareos, desencuentros,…….. Las familias bien cohesionadas sabrán gestionar los momentos complejos, que siempre los hay. Eso es lo que hace la diferencia. En este punto es capital utilizar enormes dosis de comunicación, aspecto en el que creo tenemos amplias dosis de mejora si hacemos un sereno ejercicio de autoevaluación.
En esa gestión el bien último y común debe quedar meridianamente claro y debe actuar como guía a la hora de tratar situaciones no previstas.
También en base a mi larga relación con empresas familiares sé que es muy común la aparición de elementos disonantes. Que quieren ser capitán del barco, sí o sí. Que no se encuentran cómodos con el destino o con la tripulación. Que en un momento dado parece que prefirieran navegar solos. En estas situaciones, más que nunca, una familia cohesionada debe tener claro que el bien común está por encima de los individualismos.
Tratad de ser muy felices y espero vuestros comentarios
Daniel Coquillat
Publicada a las 16:53h, 24 septiembreApreciado Manuel,
muy bueno el simil nautico. Solo añadir que aquellas empresas familiares que para gestionar las crisis intentan hacer varios barquitos rompiendo el barco en trozos más pequeños, olvidan o no saben que jamás podrán tener varias travesias, ni alcanzar rumbos distintos, muy al contrario provocarán el hundimiento del que ahora tienen.
Un saludo,
Pedro Ruiz
Publicada a las 10:16h, 25 septiembreHola Manuel y seguidores. Una vez mas, un texto que creo que nos debería conmover a aquellos que vivimos en, por y para la empresa familiar. Creo que son valores fundamentales que nunca deberíamos olvidar. En primer lugar porque son imprescindibles para el buen desarrollo de las relaciones, que determinarán, desde mi punto de vista, el devenir de la empresa, en el día a día y a futuro. Y por otra parte, creo que no deberíamos olvidarlos porque son aquellos elementos defierenciadores y distintivos de le empresa familiar. No el aglutinamiento, sino la cohesión, la fuerza del grupo que desde la libertad de cada uno hace aflorar la diversidad, la creatividad y el enriquecimiento común. Gracias Manuel
manuel bermejo
Publicada a las 09:49h, 26 septiembreDaniel,Pedro, agradezco espcialmente vuestras aportaciones que complementan perfectamente el espíritu del post
Alberto Maestre
Publicada a las 13:43h, 26 septiembreEstimado Manuel:
Muy bien traido el simil nautico. Solo un comentario y es que una vez elegido y comprobado que el capitan sabe lo que hace, hay que dejarle hacer sin interferencias familiares «donde hay capitan no manda marinero» sobre todo en plena tormenta.
Saludos
manuel bermejo
Publicada a las 16:38h, 26 septiembreAlberto, no puedo estar más de acuerdo… El papel de la marinería y de los espectadores es facilitar la tarea del captán